El teatro era el lugar donde tenían lugar las representaciones más significativas de la época. Su construcción era únicamente por un motivo de ocio.
Localizamos el teatro de Cartagena en el siglo I a.C, es decir, justo en la época Augustea que revitaliza las ciudades de las provincias romanas, sobre todo las obras públicas.
Su construcción se ha datado en el 3 d.C, bajo el Imperio de Augusto y cuya intervención está relacionada tanto es un financiación como en su ornamentación, hay una dedicación a Lucio y Cayo César que son los nietos de Augusto.
Las gradas de este teatro se disponen sobre la roca recortada de la colina de la concepción, recubierta por sillares de caliza gris. La cávea esta estructurada en tres sectores divididos por escaleras radiales, una parte se excava en la montaña y los laterales se levantan sobre bóvedas y arcos de medio punto.
La fachada o frente escénico tiene unas dimensiones de 45,80 metros de longitud y 7,50 metros de anchura, presenta doble columnata cuyas columnas son de fuste de mármol rosa y capiteles de mármol blanco. En su superficie se recortan tres exedras curvadas, lugar de las mismas puertas de acceso al escenario. El pulpitum, con nichos semicirculares y cuadrados se halla dividido por dos muros longitudinales en tres fosos paralelos.
A ambos lados del escenario se ubican sendas habitaciones rectangulares que comunican tanto con el vestíbulo exterior como con el posterior. La orquesta está contorneada por los asientos reservados a los magistrados y personajes notables de la ciudad, espacio privilegiado circundando por una balaustrada de mármol blanco que marcaba la separación con el graderío inferior.
La escena con 450 metros cuadrados supera la del prestigioso Teatro de Mérida que tiene 437 metros cuadrados. Junto con éste de Mérida y el de Sagunto, el teatro de Cartagena es de los más importantes vestigios romanos de nuestra península.
Encontramos dioses romanos que se distribuyen por la instalación que sirve de ornamento como de difusión o propaganda ideológica, está dentro de la romanización de la península. La afición de los romanos se remonta a la época de la República, pero será a partir del imperio cuando comienzan a edificarse teatros por toda la urbe. Las partes del teatro se distribuían en cávea semicircular cuya parte inferior acaba en la orchestra, un proscenio que es donde se representaba y la escena que era la parte cerrada con las arquitecturas.
En la actualidad continúan los trabajos de excavación del teatro así como el estudio y catalogación de los restos correspondientes a los diferentes extractos arqueológicos de la historia de Cartagena.
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